MAPFRE
Madrid 2,276 EUR 0,03 (+1,16 %)
Madrid 2,276 EUR 0,03 (+1,16 %)

CORPORATIVO| 06.11.2023

Evita la procrastinación y consigue tus propósitos

Thumbnail user

Para las empresas es fundamental reconocer y abordar los desafíos que afectan a la productividad y el bienestar en la vida cotidiana de sus empleados. La procrastinación, un fenómeno común que puede tener impactos negativos en la eficiencia y el logro de metas, es un aspecto relevante tanto en el ámbito profesional como el personal.

La procrastinación parece ser el motivo con el cual justificar dejar las compras navideñas para el último día, no entregar un trabajo de la universidad a tiempo o pagar las facturas fuera de plazo.

Pero ¿qué es realmente la procrastinación? Procrastinar es el acto de posponer o retrasar una tarea o actividad, a menudo optando por realizar actividades menos prioritarias o incluso evitando realizar cualquier tarea.

Se estima que el 20% de los adultos y el 50% de los estudiantes tienen graves problemas de procrastinación. De hecho, son conscientes de que es un comportamiento autodestructivo, que acarreará consecuencias negativas más tarde y, sin embargo, no consiguen evitarlo. 

En el artículo de hoy te daremos unos consejos para evitar este comportamiento perjudicial para uno mismo.

¿Por qué dejamos las tareas importantes para más tarde?

La procrastinación surge de una limitación en la capacidad de autorregulación del cerebro. El autocontrol es esencial para la supervivencia de nuestra especie ya que, por ejemplo, nos impide actuar impulsivamente cuando estamos enfadados.

Nuestro cerebro cuenta con circuitos especializados para frenar nuestros impulsos individuales en favor de recompensas a largo plazo. Sin embargo, al igual que con otras adaptaciones evolutivas, aún no hemos perfeccionado completamente el autocontrol. Los casos de comportamientos inadecuados, como es la procrastinación, demuestran que este mecanismo no siempre opera como se espera.

La procrastinación se manifiesta cuando la falta de autocontrol prioriza la gratificación inmediata (como podría ser ver un TikTok de gatitos) sobre metas que pueden resultar menos placenteras en el corto plazo (como acabar un proyecto o hacer deporte), pero que indudablemente aportarán beneficios a futuro.

¿Cómo evitamos la procrastinación?

La procrastinación es un desafío común que muchas personas enfrentan en su día a día. Existen estrategias efectivas para superar este hábito y mejorar la productividad.

En primer lugar, es fundamental establecer metas claras y específicas. Definir objetivos concretos proporciona claridad sobre lo que se necesita lograr. Además, dividir las tareas en partes más pequeñas puede hacerlas sentir menos abrumadoras y más fáciles de abordar.

Asignar plazos realistas para completar cada parte de una tarea o el proyecto en su totalidad es otra herramienta importante. Esto proporciona una estructura temporal y un sentido de urgencia que puede ser muy motivador.

Además, el uso de técnicas de gestión del tiempo puede ser de gran ayuda. Métodos como la técnica Pomodoro, que consiste en trabajar en bloques de tiempo enfocados seguidos de descansos, o la matriz de Eisenhower, que prioriza tareas según importancia y urgencia, pueden ser muy efectivos.

Identificar y minimizar las distracciones es otro paso crucial. Esto puede incluir apagar notificaciones de tu smartphone, cerrar pestañas irrelevantes en el navegador o establecer un espacio de trabajo libre de distracciones.

Es importante también practicar la autorreflexión para comprender las razones subyacentes de la procrastinación. ¿Es falta de motivación, miedo al fracaso, ansiedad u otras preocupaciones? Conocer las causas te permitirá abordarlas de manera más efectiva.

Crear un horario o agenda es una excelente manera de organizar el día. Establecer horarios específicos para trabajar en tareas importantes, así como incluir tiempo para descansos y actividades de ocio, puede ayudar a mantener el enfoque y la productividad.

Celebrar los logros, incluso los pequeños avances, es una forma efectiva de motivarse. Establecer recompensas que te impulsen a completar tareas y cumplir con tus metas es una estrategia poderosa.

Mantener un estilo de vida equilibrado con una buena alimentación, ejercicio regular y suficiente descanso es esencial. Un cuerpo y mente saludables contribuyen a mantener altos niveles de energía y concentración.

Por último, es importante aceptar la imperfección. No es necesario buscar la perfección en todo lo que se hace. A veces, es más importante completar una tarea de manera satisfactoria que perseguir la perfección absoluta.

 

ARTÍCULOS RELACIONADOS: